‘Crumble’ de ruibarbo

crumbleruibarboEste debe ser con diferencia uno de los mejores postres del mundo. Es absolutamente suculento y muy británico, hasta el punto de que seguramente la mayoría de vosotros no habréis oído jamás hablar del «ruibarbo». ruibarboplantaSe trata de una planta cuyos tallos, parecidos al apio, se comen en compota, mermelada o como relleno de varios dulces. Aunque no es nativa del Reino Unido, los británicos la adoran. Yo también. Si podéis conseguir los ingredientes, la receta no es difícil. Por otra parte, también podéis sustituir el ruibarbo por manzana, otro crumble muy popular.

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Ingredientes:

1 kg de ruibarbo, cortado en trozos de 1 cm
60 g de mantequilla
60 g de azúcar
1,5 cucharadas soperas de maizena
1 cucharada sopera de extracto de vainilla

Para el crumble de la cobertura:

200 g de harina
1 cucharadita de café colmada de levadura (tipo Royal)
150 g de mantequilla, fría y en dados
3 cucharadas soperas colmadas de azúcar
3 cucharadas soperas colmadas de azúcar moreno más grueso

Método:

Yo hago este crumble en una fuente redonda de pyrex de unos 23 cm de diámetro y una profundidad de unos 4 cm. Todavía mejor, pues queda más elegante, si tenéis una de cerámica.

– Saltear sobre fuego medio el ruibarbo con la mantequilla, la maizena, la vainilla y los 60 g de azúcar en una olla grande durante unos 5-8 minutos, hasta que la mantequilla se haya derretido y se haya formado una especie de sirope (el ruibarbo debe estar aún duro).

– Verted este relleno en el recipiente escogido y espolvorear bastante azúcar por encima. El ruibarbo necesita endulzarse pues es ácido.

– Ahora, poner la harina tamizada y la levadura en un cuenco grande y echar los dados de mantequilla. Mezclar con las puntas de los dedos hasta obtener una textura parecida al serrín (aunque habrá gránulos más gordos). Esta acción de desmenuzar o desmigar es lo que en inglés significa crumble. Agregar los dos tipos de azúcar y mezclar con un tenedor.

– Esparcir el crumble sobre el ruibarbo depositado en la fuente hasta cubrirlo todo. Se puede aplanar un poco con una cuchara.

– Pre-calentar el horno a 190ºC. Cuando esté a esa temperatura, introducir el recipiente del crumble de ruibarbo con una bandeja debajo, por si se vierte algo del líquido. Hornear durante unos 35-40 minutos, hasta que la cobertura de crumble esté dorada y el ruibarbo del relleno cocido (se habrá transformado casi en una compota). Servir templado acompañado de nata líquida y disfrutadlo.

¿Sabías que…? Al igual que el Pastel de limón y polenta, esta receta, aunque un poco adaptada, es de la autora británica Nigella Lawson. Para que estéis al día: desde que os hablé de ella por última vez, se ha divorciado de su marido, el famoso publicista Charles Saatchi. Cotilleos aparte, su crumble es imbatible.