Esta es una receta ideal para hacer cuando es temporada de higos. Son unas magdalenas muy originales, con un sabor exquisito y preciosa apariencia. Para mejorar la presentación, haced vosotros mismos las bases de papel. Para ello, coged papel de horno y recortad cuadrados de aproximadamente 12 x 12 cm. Estos cuadrados se ponen en cada uno de los agujeros del molde para hacer muffins. El número de pastelitos que os saldrá dependerá de cuánto llenéis cada cavidad, en principio entre 8 y 10. Si os apetece, servidlas con té o café.
Ingredientes:
175 g mantequilla, a temperatura ambiente
175 g azúcar fino
4 huevos, batidos
175 g harina leudante
raspadura y zumo de una naranja
200 g higos frescos (quitadles el rabito y los cortáis a trozos), más otro higo entero
2 cucharadas de miel clara
Método:
– En un bol grande, batir la mantequilla con el azúcar (se puede hacer con la batidora eléctrica), hasta formar una mezcla ligera y de color pálido, con una textura como de pomada.
– Añadir los huevos poco a poco e ir batiendo. Si se os hacen grumos, podéis añadir una cucharada de harina para disolverlos, aunque no importa mucho. Agregar y mezclar con una cuchara la harina restante así como la raspadura de la naranja. Añadir los trozos de higo y revolver con cuidado para que queden bien distribuidos.
– Repartir la masa entre los agujeros del molde de magdalenas que hemos forrado con nuestros tulipanes de papel. Cortar el higo entero que nos queda en finas cuñas o segmentos y depositar un segmento sobre cada uno de los muffins.
– Precalentar el horno a 180ºC. Hornear las magdalenas durante unos 35-40 minutos (comprobad a los 35 minutos), hasta que estén doradas y un palillo insertado en el centro salga limpio (y no con masa aún líquida enganchada).
– Mientras tanto, calentar el zumo de naranja con la miel y mezclar bien. Cuando las magdalenas estén hechas, repartir cucharadas del zumo con la miel sobre cada una de ellas. Dejad enfriar estos muffins en el mismo molde durante unos 20 minutos, antes de ponerlos sobre una rejilla para que acaben de enfriarse. Si los guardáis en una lata bien cerrada, os durarán varios días.
¿Sabías qué…? En esta receta, por «magdalena» entendemos el muffin americano, es decir, una magdalena gigante. No se debe confundir con la más delicada madeleine francesa. Los moldes para hacer muffins suelen tener doce agujeros de unos 2,5 cm o más de profundidad.